ME despierto cada día con la intención de mejorar algo, de terminar cosas y de iniciar otras. Me sorprendo con tantos pájaros en la cabeza, que se materializan día a día por la carretera. Me alegra poder ver que conozco gente maravillosa que marca mi piel y mis pensares cada que pueden. soy un niño chico que está cambiando, transformándose y re-inventando todo a su alrededor y a su paso. Soy una nube, un espiral un ciclo. Muchos ciclos. Mil veces me volví hoja y otras tantas me cambié de piel. Ahora estoy en paz, en calma, con un dolor de cabeza, con los músculos de las piernas destrozados; con el color del otoño en los ojos y con la seguridad de estar vivo. En definitiva, hemos vuelto. bienvenidos
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